¡Mae govannen, mellon nín! O como suelo decir cuando no hablo élfico: bienvenido, amigo mío. ¿Que por qué hablo élfico? Pues es que ayer vi por fin la película de Tolkien y tengo mucho que decir (pero no lo diré en élfico porque no sé muchas más palabras).
Voy a empezar esta entrada presentándome: hola, me llamo Ana e hice mi Trabajo de Fin de Grado sobre las fuentes de inspiración de J. R. R. Tolkien reflejadas en su obra, ¿qué tal? Por esto, todo lo que voy a mencionar está basado en mi propio TFG que a la vez está basado en libros de fuentes oficiales, lo que no quiere decir que todo lo que voy a decir se aplique al cien por cien a la realidad. ¿Por qué? Porque mi trabajo fue una interpretación de textos y ejercí mi libertad para interpretarlos como yo quisiera, porque esto se puede y se debe hacer. Y no lo digo yo, sino el propio Tolkien:
¿Qué significa esto? Pues que concedía al lector la libertad para interpretar un texto a su manera, de darle su propio sentido. Pero empecemos por el principio: ayer vi la película sobre la vida de Tolkien. Puntos a favor: en general respeta su biografía, tiene un tono muy tierno y bonito y la banda sonora es preciosa. Gran punto negativo: el tratamiento de la Primera Guerra Mundial y su implicación como influencia en su obra. A ver, nadie está diciendo que la guerra fuera la inspiración para El Señor de los Anillos, pero en realidad sí lo están diciendo. Y Tolkien siempre negó cualquier relación entre su vida y su obra. El caso es que la película, indirectamente, está dejando ver que la guerra le influyó para escribir su obra, y lo mismo defienden otras muchas fuentes. Pero cuando le preguntaban acerca de esto, Tolkien respondía:
Vaya, que no le parecía muy bien. En sus cartas se pueden leer muchos ejemplos en los que negaba que sus vivencias tuvieran nada que ver con el contenido de su obra. Pero entonces, ¿el Anillo Único no es una alegoría de la bomba atómica? ¿Y los orcos no son nazis? ¿Sauron no es Hitler? ¿Gandalf no es Jesucristo? ¿Valinor no es el Cielo y Mordor el Infierno? ¿La Comarca no es la campiña inglesa? ¿Isengard no es una alegoría muy evidente de la Revolución Industrial? ¿No son los Rohirrim caballeros anglosajones y los de Gondor caballeros artúricos? ¿No?
No. Y sí. Lo primero: ¿qué es una alegoría? Según la RAE es una "Plasmación en el discurso de un sentido recto y otro figurado, ambos completos, por medio de varias metáforas consecutivas, a fin de dar a entender una cosa expresando otra diferente." Es decir, contar una cosa pero realmente referirte a otra que no expresas directamente. Por ejemplo, podemos afirmar que Aslan de El león, la bruja y el armario (Las Crónicas de Narnia) es una alegoría de Jesucristo, no solo por el análisis sino porque lo confirma el propio autor. Sin embargo, Tolkien desprecia la alegoría:
Volvemos a la aplicabilidad. Tolkien es un buen señor que, si bien expresa su rechazo a la alegoría, permite al lector interpretar el significado de un texto de acuerdo a sus propias ideas y experiencias. Es decir, que si tú, como lector, quieres interpretar que la Guerra del Anillo está basada en la Primera Guerra Mundial, puedes hacerlo, pero teniendo en cuenta que estás aplicando una interpretación propia y no afirmando que el autor haya decidido hacer una alegoría.
Me gusta este concepto porque sirve para todo. Tolkien valora que un texto tiene tantas interpretaciones como lecturas, y yo también. Entonces, si quieres interpretar que Frankenstein solo trata sobre la responsabilidad moral y la existencia del ser humano, puedes hacerlo, y si quieres decir que es una obra de terror en la que hay un monstruo que da miedo, también puedes. Eso sí, siempre teniendo en cuenta que es una interpretación propia y que puede no coincidir con la visión del propio autor (que debería ser la interpretación más válida). Y esto te vale para cuando discutas con alguien en internet sobre la verdadera intención de un autor al escribir un texto: muchas veces no podemos saber lo que de verdad pretendía el autor, pero hay tantas interpretaciones válidas como experiencias. Esto me recuerda a cuando el colectivo LGTB defendía que la canción Let it go de Frozen iba sobre salir del armario. Sabemos que Disney no la hizo con esa intención, pero si el mensaje encaja y no hace daño, ¿por qué no iba a ser una interpretación válida?
En conclusión: no me pareció bien el tratamiento de la guerra en la película porque, directa o indirectamente, implica la presencia de una alegoría. Por un lado, es una idea defendible y bastante lógica, pero por otro lado pienso que se debería respetar la memoria del autor. Si él dijo que no había ninguna conexión entre la guerra y su obra, habría que respetarlo. Así que la conclusión final es que todo es relativo y abierto a interpretación. (¡Anda, igual que la conclusión de mi TFG!)
Bueno, espero que haya sido interesante, útil o al menos entretenido. Ahora, cuando no estés de acuerdo con alguien sobre la interpretación de un texto le puedes hablar de la aplicabilidad. O mandarle esta entrada. De nada.
Y si quieres más contenido sobre Tolkien, uno de mis primeros post de mi Instagram va de curiosidades sobre él. Y si tienes mucha curiosidad por mi TFG, envíame un mensaje y lo hablamos. ¡Nos leemos en la siguiente entrada! Namárië (adiós).
¡Holaaa! Tengo una amiga a la que le encantaría tu entrada, es una fanática de Tolkien y todas estas cuestiones (hizo su tesina sobre este autor <3)
ResponderEliminarAsí que sí, le paso el artículo :b
Muchísimas gracias por la opinión :)
¡Besos 🖤 desde Tiempo Libro!
¡Hola!
ResponderEliminar¡Un tema muy interesante! Es cierto que todo está abierto a interpretación, y es la parte más bonita de todo, ¿no?
Personalmente, creo que aunque un autor no se base en algo conscientemente, de forma inconsciente lo que nos rodea nos influye en lo que hacemos y, a los escritores, en lo que escribimos. Si anda como un pato, nada como un pato y… ya sabes XD
Pero al tiempo también admito que es respetable que si el mismo autor negaba la relación entre su obra y la guerra… pues hay que respetarlo porque no somos él jajaja
❊ Leer Sin Límites ❊
Un besazo! ♥️
¡Qué interesante tu trabajo de fin de grado! Me encantan las pelis y tenemos un libro por casa pero es de bolsillo así que no hay quién lo lea tendremos que hacernos con unas ediciones mejores =)
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarPedazo de entrada. Yo creo que todos los autores ponen un cachito de "realismo" en sus historias. Situaciones que han vivido ellos o gente de su entorno, incluso aunque no se den cuenta. Vivir la guerra de primera mano... no me lo quiero ni imaginar. ADORO a este autor, me ha encantado tu entrada.
Beso!
¡Hola!
ResponderEliminarTus entradas me parecen muy interesantes y originales. Creo que hoy aplico esa frase de 'nunca de acostarás sin aprender algo nuevo'. No he visto la película pero tal y como explicas lo de la guerra te entiendl. Si Tolkien dijo que no tuvo nada que ver, pues que no se inventen cosas. Pero bueno, siempre hacen los que quieren.
Y me gusta mucho que digas que cada persona puede interpretar un texto, canción o lo que sea a su manera. Creo que es lo más correcto, a cada persona le puede decir o hacer sentir algo distinto.
¡Un abrazo!